Ponte Vecchio

Con sus casas y tiendas colgantes, el Ponte Vecchio es uno de los puentes más famosos del mundo. Como curiosidad, el "Puente Viejo" también es el puente de piedra más antiguo de Europa.

El Ponte Vecchio es a Florencia lo que el Coliseo es a Roma, y es que su imagen es la más conocida y representativa de la ciudad. El Ponte Vecchio es el símbolo del romanticismo que inunda toda Florencia.

Los orígenes del "Puente Viejo" se remontan al año 1345 lo que le convierte en el puente de piedra más antiguo de Europa.

En los siglos XV y XVI sus casas colgantes estuvieron ocupadas por carniceros y matarifes pero, cuando la corte se mudó al Palacio Pitti, Fernando I ordenó cerrar las tiendas por el mal olor. Desde entonces las tiendas han sido ocupadas por joyeros y orfebres.

Otro detalle curioso de la época fue la construcción del Corredor Vasariano, un corredor que recorre la parte este del puente desde el Palazzo Vecchio hasta el Palazzo Pitti.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el Ponte Vecchio fue el único de los puentes de Florencia que no fue destruido por las tropas alemanas.

Los candados del Ponte Vecchio

Además de sus casas colgantes, si hay algo que caracterizó el puente durante años, fue la cantidad de candados que eran colocados en éste como señal de amor.

Actualmente el rito sigue funcionando, pero cada muy poco tiempo las autoridades quitan los candados por la seguridad de la estructura.

Un lugar para descansar

Siempre y cuando no te importe estar rodeado de cientos de personas, el Ponte Vecchio es un buen lugar para relajarse un rato.

Al atardecer, mucha gente se sienta a ver la puesta de sol mientras escucha a alguno de los artistas callejeros que intentan ganarse la vida en este puente.